Fue tu risa inmensa, tu boca que besaría por todos los tiempos inmortales que nos queden, lo que me sorprendió. ¿A caso así es el instante del amor?
Claro que fue un instante pero eterno. Intenso y breve. Así de contradictorio como la vida misma.
Estábamos rodeados de otros uniformes, los de tus compañeros, éramos felices en ese espacio de tiempo. Siento, creo, que te amé porque yo también estaba feliz.
Y este sueño difiere abismalmente de uno similar dos semanas atrás. Aquí estaba alegre y sin miedos de unirme a alguien y eras vos.
"Ella existió solo en un sueño.
Él es un poema que el poeta nunca escribió"
La Renga