Por cuestiones cabuleras lo
llamaremos AM y es un personaje que transita y más veces repta por el fangoso
mundillo político. A comienzos de la década pasada hizo una especie de Chamamé
al entonces Presidente Néstor Kirchner bajo el conchabo del entonces
vicegobernador, Eduardo Galantini (PJ). Mientras su mecenas iba a las radios a
discursear el “cantante” aprovechaba y metía (literalmente) su casette en las
emisoras para saludar al Jefe de Estado nacional.
El pasado jueves los concejales
Justo Estoup y Verónica Navarro armaron un proyecto de ordenanza para
declararlo a AM ciudadano ilustre de Corrientes, es decir, ponerlo en el mismo
escaparate de Pocho Roch y el extinto, Edgantor Romero Maciel, sólo por
mencionar un par de ejemplos. El proyecto en cuestión pasó a la comisión de
Cultura que a esta altura el nombre parece un chiste, debería llevar el nombre
de: comisión de amigos y afines. O bien; vení que te hacemos ilustre por
cantarnos gratis en los actos y en nuestras reuniones familiares.
AM develó el motivo que habría
llevado a los ediles de la ciudad a querer ponerlo en el bronce de los ilustres
de la cultura vernácula. “Es una sorpresa que me querían dar y ojalá que sirva
para reconocer a otra gente, porque para ser Ciudadano Ilustre hay muchísima
gente que hizo cosas para el bienestar de los correntinos”. Indudablemente el
“cantante” se refería a otras personas y agregó: “Tan honrosa distinción la que
proponía el proyecto de Justito”, aludió al edil kirchnerista.
El caso de AM no es el único donde
personajes que pululan desde hace décadas en los corrillos de la política,
toman litros de mate en oficinas ministeriales para luego inclinarse bastante y
degustar medias. Quizás allí radique la perseverancia para ser ciudadanos
ilustres y salir en los diarios y en sus respectivos álbumes familiares. Ocupar
las portadas de los suplementos “Cultura” de los tabloides.
A modo de ejemplo van algunos
ilustres: Mario Bofill es Senador de la provincia desde el 10 de diciembre
pasado, su esposa es Diputada provincial desde idéntica fecha; el capo cómico
Eugenio “Nito” Artaza es Senador nacional desde el 10 de diciembre de 2009. El
título honorífico no lo tienen pero tuvieron uno donde toman decisiones por el
resto de la sociedad, es decir, por nosotros.
Además, siguen en sus respectivas actividades,
dan shows y producen espectáculos. ¿La política les abrirá más puertas para su
verdadero trabajo que es el de estar sobre un escenario?
Gilberto Gil fue ministro de
Cultura de Brasil entre 2003 y 2008, el cantautor dejó la actividad artística
durante esos años para dedicarse a su cargo y por su trabajo político junto al
espacio que lideraba y aún lo hace el ex Presidente del vecino país, Lula da
Silva. Otro tanto hizo Rubén Blades cuando ocupó el ministerio de Turismo de su
país (Pananá) entre 2004 y 2009. Nuestras estrellas locales no solamente están
a millones de años luz en lo artístico de los mencionados, también lo están en
el sentido común y en la honestidad. Con ellos mismos cuando se dicen artistas
populares y con quienes los votaron para que mejoren la calidad de vida de la
población, y no sus bolsillos.
A continuación el fragmento de una
nota hecha por un gran amigo sobre la bizarra creación de AM para saludar a
Néstor Kirchner. Fue publicada en un diario local días antes de la primera
visita del Presidente a Corrientes. No cito al autor para no incomodarlo.
“La pieza musical, cuya letra y
música pertenecen al asesor galantinista, abogado y cantor de ocasión Alfredo
Monzón, se titula "Sureño porá" y constituye una oda a las cualidades
del primer mandatario.
Grabado en tiempo récord por el
trovador a sueldo (Monzón supo prestar servicios a la Intervención Federal
conducida por el radical Ramón Mestre), el chamamé en honor a Kirchner comenzó
a ser propalado anoche a través de algunos espacios radiofónicos contratados
por el PJ local y también mediante el parlanteo callejero.
La letra es una explícita
declaración de amor a Kirchner. En sus dos estrofas cantadas aparecen bondades presidenciales
a saber: "De porte sencillo y de manos amigas, pensando en su gente de
noche y de día, corazón sincero buscando alegrías para esa su amada llamada
Argentina". Puede que Monzón no maneje muy bien el arte de la rima, pero
queda claro que es un experto de la lisonja superficial”.