El viernes 02 de Mayo de 2014 el gobernador Ricardo Colombi (UCR)
estaba feliz. Fuera la Residencia Oficial
Nº 2 sonreía con ese aire inconfundible que suele tener la victoria, unos
minutos antes había despedido de esa vivienda estatal destinada a reuniones
oficiales, al Jefe de Gabinete Nacional, Jorge Milton Capitanich (PJ). Lejos
quedó el “mal nacido” que había endilgado el mandatario correntino al
funcionario nacional durante la campaña electoral 2013. La iracundia fue porque
“Coqui”, así conocido el licenciado gobernador del Chaco, puso a disposición de
Carlos Espinola (PJ) toda una logística para que el candidato a gobernador del
kirchnerismo pueda ganar los comicios. Pero esa historia ya es conocida. Además
es otra historia.
Luego de la partida del visitante, Colombi no paraba de
hacer chistes ante tres movileros radiales y un cameraman. Hablaba de lo que
más le gusta. El fútbol y el penoso presente de Boca Juniors, quizás ésta, la
única debilidad del gobernador local. El Senador y presidente de la UCR , Sergio Flinta, observaba
el soliloquio de Colombi y las migas de chipas que quedaron sobre la mesa
ratona de la casa estatal donde departió con su nuevo aliado. El legislador
quería irse pero su jefe político no cesaba de hablarles a su séquito de
cronistas radiales, los más fieles que entre otras cosas, supieron ser
recompensados con casas del Instituto de Vivienda de Corrientes (Invico) a
inicios de 2010. Pero esa también es otra historia que no viene al caso.
Sin embargo, uno de ellos se mantenía en silencio. No
participaba de la charla. Sólo escuchaba con parquedad, la distancia tenía que
ver con el “muertos de hambre” que había dicho Colombi semanas atrás hacia los
periodistas ante un rumor de re-reelección. En el pensamiento del mandatario
provincial tal rumor fue aventado ante la valla en la pauta publicitaria
oficial que aplicó a cronistas y medios de comunicación desde noviembre de
2013. Luego de haber ganado, con casi todos esos mismos medios y periodistas a
su favor. Una receta que Colombi aplica metodológicamente desde 2001. Dispendio de dinero estatal en propaganda política e institucional antes de las urnas. Después con el triunfo en las manos se cierran los grifos. Por
cinismo los beneficiados cuando dejan de percibir la pauta estatal lo empieza a
ver al jefe de Estado local como un déspota y salvaje, antes lo trataban como
un estadista a pesar de que los somete a constantes maltratos y diatribas.
Ésta, también es otra historia.
El gobernador al notar que uno de los presentes no entraba
en la amena charla, lo interrogó sobre la marcha a la gobernación de
periodistas gráficos el pasado 30 de Mayo.
A continuación el diálogo entre el Jefe de Estado y el
cronista en cuestión. Las veces en que aparecerán reproducidas las palabras del
gobernador no estarán las eses. Es sólo parea reflejar lo más idéntico posible
el habla del mandatario provincial, poco proclive a la buena dicción y eses. De
fondo en el horizonte: el Paraná, los otros dos movileros y cameraman como
mudos testigos del cruce.
Gobernador: eh…
vo. Firmate eso de la marcha de lo periodista.
Movilero: No. Eso
es de los diarios, de esos delincuentes a los que vos les das subsidios
(entiéndase propietarios de los matutinos gráficos que reciben pauta oficial)…ellos
(por los periodistas gráficos) pelean por la escala salarial. Nosotros (movileros)
peleamos por no quedarnos en la calle.
Gobernador: Te
dije que tienen que organizarse y hacer una Asociación nueva…
Movilero: (ante
la mirada atónita de los otros dos cronistas y el camarógrafo) devuelve el
embuste: Para qué…si vos después te juntas con (mencionada al dueño de la radio
donde trabaja) y arreglas todo. ¿Y nosotros vamos hacer una marcha?.
Gobernador:
(Menciona dos veces el nombre del joven que “conduce” la radio donde se
desempeña su interlocutor y remata): Yo no hablo con ese pelotudo.
Movilero: Para
qué queres que nos organicemos si después haces siempre lo mismo y no atendes a
nadie.
Gobernador: Dejá
de hablar boludece. Cuándo yo no atendí a alguien !!!!